En el episodio #22 de Guitar Chat, tuvimos el placer de charlar con Juanjo Melero, guitarrista icónico del rock español, miembro de la legendaria banda Sangre Azul, y actualmente un respetado docente y músico en activo. En esta entrevista íntima y cercana, Melero nos lleva de viaje por su carrera musical, su evolución personal y su experiencia como usuario del puente Vegatrem.
De fan de Barón Rojo… a rodie de Armando
Juanjo nos cuenta cómo su primer contacto con el rock fue en el Parque de las Avenidas, escuchando a Rainbow o Whitesnake gracias a un amigo de su hermano. Recuerda especialmente el día que escuchó “Tu prisiónero” de Barón Rojo:
“Pensé que era AC/DC. Cuando descubrí que era en castellano me voló la cabeza.”
Este impacto le llevó a perseguir su sueño con determinación, hasta convertirse en rodie de Armando de Castro, cargando equipos y afinando guitarras.
Sangre Azul y los años dorados del hard rock español
Tras pasar por bandas como Oro Negro, Cráneo o Marsall Monroe, su sueño se hizo realidad: con 20 años, Melero entra a formar parte de Sangre Azul, y debuta en el Rocódromo de la Casa de Campo ante 40.000 personas. Una experiencia inolvidable:
“Tocar con mi grupo favorito, en ese escenario… fue cumplir un sueño.”
Junto a Carlos Raya, formaron una dupla guitarrera basada en la hermandad, el respeto y el trabajo compartido:
“Quería entrar en Sangre Azul, pero con una condición: que las guitarras se repartieran 50/50. No quería ser solo guitarrista rítmico.”
Del escenario a la escuela: evolución y oficio
Tras sus años de rock puro, Juanjo vivió un proceso de apertura musical. Viaja a Los Ángeles, absorbe nuevas influencias y a su regreso crea Santa Fe, una banda que fusiona rock con otros estilos. A partir de ahí, empieza a colaborar con artistas de todo tipo: Nacho Cano, Rozalén, Dani Martín, Chenoa o El Arrebato, entre muchos otros.
“Aquí no te puedes especializar. Si quieres vivir de la música tienes que saber tocar un guapango, un funky o una bulería.”
La docencia como vocación
Juanjo fundó Riff & Roll, su propia escuela de música en Parla, que el año próximo celebra su décimo aniversario. Un espacio donde la técnica se une a la pasión, y donde transmite todo su conocimiento a nuevas generaciones.
“Pensaba que el talento era lo más importante. Hoy sé que el trabajo es mucho más decisivo.”
En su escuela, adapta el método a cada alumno, motivando, inspirando y abriendo puertas a distintos estilos y formas de entender la guitarra.
Su música: rock, honestidad y compromiso
Melero sigue creando música con varios proyectos personales. Entre ellos destaca Universo Violento, un proyecto instrumental y solidario cuyos discos no tienen precio, sino “valor” —cada uno aporta lo que puede. También trabaja en Tinta China, su nuevo grupo junto a Pablo Perea (La Trampa) y César Uña, con nuevo material previsto para finales de año.
“Quiero que mi música esté conectada con la vida real, que sea sincera.”
Su experiencia con Vegatrem
Durante el verano, Juanjo comenzó a usar un puente Vegatrem en su Stratocaster, y nos cuenta cómo esta simple mejora transformó su relación con el instrumento:
“Ahora esa guitarra que tocaba poco se ha convertido en mi guitarra principal.”
Agradece especialmente la estabilidad en la afinación y el sustain que le proporciona, además de permitirle recuperar técnicas expresivas que antes evitaba por miedo a que la guitarra se desafinara.
“Es super estable. No solo mantiene la afinación, sino que inspira. Hay instrumentos que parece que están hechos para ti, y el Vegatrem me ha hecho redescubrir mi Strato.”